Esta especialidad americana de raíces alemanas se ha convertido en uno de los platos más exitosos e irresistibles. Pero no siempre resulta tan fácil de preparar como uno espera. Hoy desvelamos cuál es la mejor carne de hamburguesa y cómo cocinarla para conseguir que salga bien jugosa.
Nos sobran las excusas para disfrutar de una sabrosa hamburguesa en cualquier momento del año. Pero si hay un día concreto donde el pretexto no puede ser mejor, ese es el 28 de mayo. Y es que esta es la fecha en la que el calendario gastronómico celebra el Día Internacional de la Hamburguesa. Un bocado que, de forma casi involuntaria, muchas veces asociamos por inercia al fast food pero que, bien preparada y utilizando unos ingredientes de calidad, puede convertirse en un verdadero festín gastro en el paladar.
Este delicioso plato, hecho con dos rebanadas de pan y aderezado con todo tipo de ingredientes, se ha convertido en un alimento muy popular. Lo podemos encontrar en múltiples versiones: de carne de pollo, de ternera, de cerdo, con pan, sin pan, con pepinillos, aros de cebolla, tomate, tocino, lechuga… ¡Solo de pensarlo se nos hace la boca agua!
Es cierto que las preparaciones e ingredientes son infinitas ya que podemos agregar a nuestra hamburguesa todo cuanto se nos ocurra. Sin embargo, la clave para lograr la hamburguesa perfecta, a la altura del mejor restaurante, está en la carne. Por ello, como expertos en productos cárnicos frescos y tradicionales, la carne de hamburguesa de La Abuela Marga será un buen punto de partida para contar con un producto de gran calidad.
Si tú también eres un amante de este delicioso plato, te contamos cómo sorprender a tus invitados la próxima vez que prepares unas hamburguesas en casa.
El incierto origen de la hamburguesa. ¿Es estadounidense?
Antes de ponernos manos a la obra, conozcamos de dónde procede este plato. Cuando hablamos de las hamburguesas, inmediatamente, las asociamos con la comida norteamericana, pero su origen no se dio en tierras americanas. A diferencia de lo que muchos de nosotros pensamos, la hamburguesa nació en Europa por la necesidad de tener un alimento nutritivo y fácil de transportar.
Concretamente, la ciudad alemana de Hamburgo fue la cuna de la hamburguesa, y es de ahí de donde proviene su nombre. Años después, este símbolo culinario del país dió el salto hasta Norte América, donde se popularizó en lugares como Chicago y Nueva York. Poco a poco se fue adaptando, le agregaron los dos panes y le incorporaron otros ingredientes hasta convertirse en lo que hoy conocemos como hamburguesa.
En las últimas décadas, la hamburguesa ha experimentado una gran evolución en la gastronomía gourmet. Reconocidos chefs han introducido ingredientes novedosos y de alta calidad para elaborar este plato: panes artesanales, carnes de ternera de primera salida, condimentos y toppings creativos…Así las hamburguesas gourmet, presentadas con diferentes formas y sabores únicos, se han convertido en un plato referente en los restaurantes de alta gama donde se presta especial atención a su presentación para crear una experiencia culinaria exclusiva y deliciosa.
La mejor carne de hamburguesa: ¿ternera o pollo?
Cuando nos proponemos elaborar hamburguesas en casa, muchas veces no prestamos atención a lo más importante: la carne. Nos conformamos con cualquier corte o calidad, no la conservamos de la forma adecuada, la picamos nosotros mismos, o incluso peor, ¡la compramos ya envasada! Y así no lograremos la hamburguesa perfecta, te lo aseguro.
Así, cuando te dispongas a preparar este plato en casa, hay cuestiones básicas que debes tener en cuenta a la hora de elegir la carne de hamburguesa que vas a utilizar:
- Di adiós a la carne picada envasada. Acude a tu carnicería de confianza y escoge personalmente el trozo de carne que más te guste y pide que te lo muelan.
- 50% carne y 50% grasa. La grasa es lo que va a dar sabor y jugosidad a tu hamburguesa casera, así que lo mejor es seleccionar un corte que esté equilibrado en carne y grasa.
- El tamaño importa. Aunque el peso de cada porción depende del gusto del consumidor – desde una pequeña de 50 gramos al cuarto de libra de 125 gramos –, los chefs expertos aconsejan que el trozo de carne para hamburguesas debe ser tan grueso como las dos mitades de los panes juntas. Para que al morder podamos saborear la misma cantidad de carne que de pan.
Respecto a las carnes de hamburguesa de La Abuela Marga puedes escoger entre nuestras burger mixta de pollo y burger mixta de ternera. Tanto la carne de ternera como la de pollo contienen beneficios nutricionales, pero difieren por sus nutrientes y propiedades.
Beneficios de la carne de ternera:
- Una fuente de hierro, esencial para transportar el oxígeno, y zinc, importante para el sistema inmunológico y la salud celular.
- Carne rica en vitamina B12, necesaria para la formación de glóbulos rojos, el funcionamiento del sistema nervioso y el metabolismo.
Nuestra burger mixta de ternera es un producto elaborado con carne de cerdo y ternera, picadas y adicionadas con una composición de especias que le da ese sabor característico.
Beneficios de la carne de pollo:
- Baja en grasas saturadas
- Menor contenido de calorías
- Menores niveles de colesterol
La hamburguesa de pollo de La Abuela Marga, elaborada con carne de pollo picada y una composición de especias, contiene más del 50 % de carne de pollo, fibras vegetales y nutrientes ricos en fibra y vitaminas C y E.
¡Fogones al punto! Cómo cocinar la carne de hamburguesa
Tras haber seleccionado al protagonista de este plato, la carne, llega el momento de cocinarla.
La preparación de la carne de hamburguesa es algo nuestro, propio y, por tanto, subjetivo. Es una opinión, pero una opinión fundada en la experiencia que tenemos en carnes y cocina. Por eso, te presentamos las reglas que debes seguir a la hora de cocinar la carne de hamburguesa que hará que tu plato triunfe: sartén muy caliente y sin aceite.
Las razones son claras. Si la sartén no está muy caliente, la carne quedará cocida y no tendrá ese rico aroma a tostado. Por otro lado, si la carne de hamburguesa tiene grasa de por sí, ya soltará ella sola su ‘aceite’, por lo que no hace falta que añadamos más cantidad.
A continuación, y una vez que pongamos nuestra hamburguesa casera en el fuego, ¿cuántas vueltas debemos darle? Lo recomendable es ¡no marear la carne! y darle el menor número de vueltas para conseguir un buen sellado y evitar que se seque. La carne se tiene que quedar por un lado bien dorada y luego, una vez llegado a ese punto tostado, darle la vuelta. El segundo lado ya lo dejaremos el tiempo que sea necesario en función del punto de la carne que busquemos: poco hecha, al punto, muy hecha…
Y la sal, ¿en qué momento la añadimos?
Aunque ya lo hemos contado alguna vez, no está de más recordar para los despistados que la sal ayuda a descomponer las proteínas. Por lo que si echas la sal mucho antes de cocinar la carne, la textura de la carne se verá afectada y la hamburguesa quedará más seca. Por el contrario, si añades la sal al final de su cocinado, harás que la hamburguesa quede dura. Así pues, el momento ideal para echar la sal es justo antes de echar la carne de hamburguesa a la sartén.
Sin duda, si cocinas la carne de hamburguesa de este modo, ¡todos querrán probar este plato!
Llegado el momento de acompañar la carne de hamburguesa, las opciones y combinaciones con otros ingredientes son infinitas: queso, bacon, lechuga, tomate, champiñones, jamón, aros de cebolla, huevo, jalapeños, cebolla… Recuerda escoger el mejor acompañamiento a la carne de hamburguesa para convertir este plato en una comida completa, sana y equilibrada.
Y ahora, hamburguesero del mundo, ¿conoces otro truco infalible para hacer tu hamburguesa perfecta? Cuéntanos cuál es tu receta estrella. Para ir abriendo boca, en La Abuela Marga te mostramos un breve listado que reúne las características de las que debe hacer gala toda hamburguesa perfecta.