Todos hemos oído cosas buenas y cosas malas sobre el consumo de carne, y es que en estos días en los que hay cierta consternación y obsesión sobre las dietas y la alimentación que llevamos a cabo, sería interesante conocer el alcance de ciertas verdades y mentiras.Todos hemos oído cosas buenas y cosas malas sobre el consumo de carne, y es que en estos días en los que hay cierta consternación y obsesión sobre las dietas y la alimentación que llevamos a cabo, sería interesante conocer el alcance de ciertos mitos y verdades.
Muchos de estos mitos están infundados y algunos otros si tienen cierto fundamento. Veremos a continuación algunas pinceladas que podrán sacarnos de ciertas dudas que podríamos tener respecto al consumo de carne.
Sí sería cierto:
- Que es muy importante tener una dieta equilibrada y variada, y está debería estar acompañada de frutas, verduras, legumbres, lácteos, pescados y carnes y, no sólo limitarla a estos últimos.
- El consumo de carne roja en exceso puede tener efecto cardiovasculares contrarios.
- Las carnes fritas en exceso o con excesivo aceite así como frituras son menos sanas que cocinadas a la plancha o hervidas.
- La piel del pollo o las zonas grasas de nuestras piezas de carne no tienen porque ser perjudiciales, si no que sencillamente su consumo viene acompañado de un aporte graso mayor.
- Tomar carne por la noches no significa que directamente sea perjudicial para la salud, pero si es cierto que su consumo a estas hora viene acompañado de un aporte de calorías y carbohidratos que no van a ser “quedamos” mientras dormimos.
Sí sería falso o sería un mito:
- Que la carne cruda es perjudicial. En realidad hemos de encontrar un punto de cocinado perfecto, ya que la ingesta de alimentos demasiado crudos puede ser indigesta pero por otro lado, un sobrecocinado de las carnes puede llevar a quemar partes de la misma que dentro de nuestro organismo son perjudiciales.
- El ser humano no está preparado para comer carne. Respetamos todo tipo de inclinación y concienciación alimenticia del planeta, pero hemos de saber que el ser humano son omnívoros y estamos perfectamente preparados para el consumo de carnes.
- Las grasas que contiene la carne es nociva para el cuerpo. Como casi todo en esta vida, cualquier cosa en exceso puede ser perjudicial, pero las grasas que nos aporta la carne, siempre y cuando llevemos un consumo equilibrada, no tendremos ningún problema.
- Comer carne engorda. Algunas carnes podrán engordar más que otras dependiendo de su cantidad de grasa y proteínas, pero contamos con un amplio espectro tipos de carnes que se ajustarán a nuestra dieta, y llevando una dieta equilibrada, te aseguramos que no engordan más que cualquier refresco azucarado.
Esperamos que con esta pequeña serie de consejos y de falsos mitos estudiados y desgranados, podamos conocer mejor qué es cierto y qué no sobre el consumo de carne. Como bien hemos ido destacando a lo largo de esta entrada en blog, La Abuela Marga recomienda un consumo y una dieta equilibrada y variada para que disfrutes de una gastronomía rica en carnes.